Se ha generalizado con el nombre de kollas a los puneños y sus descendientes, algunos quebradeños y toda otra población de orígen quechua-aymara. Se estima una población de 170.000 personas.
Tierra: Viven en Jujuy y Salta. Sus ocupaciones son antiquísimas y no cuentan con los títulos de propiedad. Perseguidos y amenazados por terratenientes, algunas comunidades sufren severas represiones policiales o son "persuadidos" de abandonar sus tierras con cierre del paso hacia los centros poblados donde venden sus productos. Algunos ocupan tierras fiscales sin títulos o como arrendatarios y cuidadores de ganado ajeno. Otros viven en las villas periféricas de las ciudades.
Organización: Algunos viven en comunidades y practican trabajos en cooperación como la minga (entre todos cosechan lo de cada uno).
Economía: Pequeños agricultores y criadores de animales. Cosecheros golondrinas y mineros marginados y explotados. La mujer se emplea en servicios domésticos en la ciudad. Realizan tejidos en telares. Apenas sobreviven.
Cultura: A pesar de la aculturación sufrida debido a la acción colonizadora, aún practican algunos de sus rituales y mantienen otras formas culturales como la minga, antigua forma de cooperación; el serviñakuy o prueba de pareja y rituales vinculados al culto de la tierra: la Pachamama, señalada o marcación de animales, apachetas o descanso de viajeros, entierro y desentierro de pucllay o kacharpaya (carnaval), chaya y chayar (beber) y corpachada (dar de comer a la tierra); Tinkunakuy, topamientos o encuentros de compadrados, musiqueros, parcialidades o comunidades.
Sus instrumentos musicales tradicionales como quena, anata, siku, erke y erkencho, que han ingresado a la música popular o folklórica de nuestro país. Hablan su lengua. Después del guaraní es la segunda lengua indígena de mayor uso en el país.Muchos de sus rituales se han desvirtuado para satisfacer curiosidades turísticas.
sábado, 6 de marzo de 2010
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